Y esto es lo que me ha pasado con Iron Man. La segunda fue tal chasco, que me pensé muy mucho ir a ver esta tercera. Finalmente, le di una oportunidad, y no me ha defraudado.
Infinitamente mejor que su antecesora, Iron Man 3 se mueve con un guión espectacular, una historia muy bien contada y un oscurantismo muy bien difuminado, con la pareja protagonista, Downey- Paltrow, brillando con luz propia, un Ben Kingsley que sigue sorprendiendome y un autentico pastelito llamado Rebecca Hall, para admirar interpretativa y hermosamente.
La B.S.O. de Brian Tyler sigue siendo espectacular.
Los chistes de Downey siguen teniendo la chispa adecuada para arrancarte una sonrisa, cuanto menos.
Momentos gloriosos, como la aparición de todas las armaduras funcionando por si mismas, hacia el final.
Ah, por cierto, quedaros hasta el final de los títulos de crédito, y sabréis a quien le esta contando Tony Stark su historia. Es el último chise de la peli.
Recomendadisima, para amantes de la acción y la Marvel.
Por cierto: Tony Stark volvera.
Besitos.
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