Ayer lo dije.
Dije, que ponía mis esperanzas, de un terratremol, como mandan los cánones, en la Benlloch de Chelva.
Y ahí estaba. Sonando a gloria, a maravilla, como la Novena Sinfonía de Beeethoven.
Empezó, con ruido. Sin ninguna clase de espera. Desde el principio. Sin pausa alguna. Creciendo, como crece un niño en el interior del vientre de una madre.
Un humo anaranjado, y posteriormente blancuzco inundó la Plaza del Ayuntamiento de Valencia.
Y, cuando llevábamos unos 4 minutos, comenzó el parto. Poco, a poco... el ruido convirtió en Saigón, la plaza. Y, entonces... la maravilla... la obra de arte... la adrenalina, hecha ruido...:
El Terratremol...
Y ahi estaba yo... emocionado... sin poderme creer lo que estaba presenciando... 7 mascletas, para escuchar, lo que llevaba un año esperando.
Por favor, que nadie me entienda mal. Que ninguna de las 6 mascletaes anteriores me ha defraudado, para nada. Es más, las he disfrutado, todas y cada una de ellas, con una gran emoción. Simplemente, es que soy un adorador de los terratremols potentes. Cuanto mas, mejor.
Pues eso, que un grito de: "Sabía que podía confiar en vosotros!", salió de mi garganta, con toda la emoción, que este tipo de maravillas pirotécnicas, me hace sentir.
Os dejo un vídeo, que he encontrado en YouTube, con la mascletá.
Pero, como siempre digo, sobre todo, con terratremols como este, como en directo, en ningún lado...
Besitos falleros...
impresionanate la macletá, a ver si un año de estos puedo ir...Mi blog está de sorteo anímate a dejar un comentario en la segunda entrada y así podrás ganarte un broche. Gracias y un saludo
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